NO HAY PRUEBAS CIENTÍFICAS DE QUE LAS "VACUNAS" COVID HAYAN SALVADO UNA SOLA VIDA

El viejo adagio de que "las vacunas salvan vidas" no puede aplicarse en modo alguno a la "vacuna" experimental covid-19. No importa cuántas veces se le diga al público de creer en las mentiras, todavía no hay datos científicos que lo demuestren. Un análisis de Peter Doshi, publicado en el British Medical Journal, señala lo evidente: los fabricantes de "vacunas" han diseñado ensayos clínicos que no aportan ningún dato sobre los beneficios de la mortalidad por todas las causas.

Los ensayos clínicos no estudian la transmisión viral, la carga viral o la prevención de la enfermedad grave, ni tampoco las hospitalizaciones o las muertes. Está claro que los fabricantes de "vacunas" no confiaban lo suficiente en su capacidad para demostrar que las "vacunas" experimentales de ARNm podían salvar una sola vida. No hay ni un solo ensayo clínico de "vacunas" que haya detectado una reducción de los resultados graves de las mismas. Todo fue un fraude desde el principio.

Ni un solo ensayo clínico de las "vacunas" contra el covid-19 ha estudiado la transmisión, la enfermedad grave, la hospitalización o la muerte

En la actualidad, los gobiernos de todo el mundo están "imponiendo" una serie interminable de inyecciones sin ninguna prueba científica que demuestre que esta metodología de interferencia genética puede prevenir una sola infección o salvar una sola vida. Peor aún, los fabricantes de "vacunas" ya han eliminado la cohorte de controles en sus ensayos clínicos al inocularlas. Al violar los estudios clínicos de esta manera, los fabricantes de "vacunas" están borrando todos los datos potenciales que muestren que las "vacunas" aumentan las tasas de infección, aumentan las enfermedades graves y causan una mortalidad excesiva.

Sin embargo, los datos de seguridad que se comunican al Sistema de Notificación de Efectos Adversos de las Vacunas (VAERS) refutan la propaganda actual de que "las vacunas salvan vidas". La avalancha de informes sobre lesiones (desde adversas hasta graves efectos secundarios) causadas por las "vacunas" dibuja un panorama espeluznante de negligencia médica y muerte por negligencia generalizadas. Se han notificado cientos de miles de problemas médicos post-vacunación, incluyendo miles de muertes. En lugar de retirar la "vacuna" experimental del mercado, los organismos reguladores y los dictadores gubernamentales quieren imponer los pinchazos a los niños y amenazar los medios de vida de la gente.

Igualmente preocupante es el hecho de que los que se niegan son vilipendiados como "proveedores de información errónea" que ponen en "riesgo la salud pública". Por mucho que se propaguen estas mentiras, no hay pruebas científicas de que los pinchazos covid salven una sola vida. De hecho, hay muchos datos de farmacovigilancia que sugieren que las inyecciones matan a las personas en un número mucho mayor.

Los fabricantes de "vacunas" han engañado al mundo, llevando a la gente a las fosas comunes Peter Doshi confirma: "En un ensayo con 30.000 personas, las hospitalizaciones y las muertes debidas al covid-19 son sencillamente demasiado raras en la población estudiada para que una vacuna eficaz muestre diferencias estadísticamente significativas", y añade. "Lo mismo ocurre para saber si esto puede salvar vidas o prevenir la transmisión: los ensayos no están diseñados para averiguarlo".

Los ensayos de fase 3 no fueron diseñados para detectar una reducción en las hospitalizaciones y no pueden determinar si la "vacuna" interrumpe la transmisión del virus. Los fabricantes de la "vacuna" no abordaron los casos de enfermedad grave por covid-19, sino que compararon las tasas de enfermedad leve.

Los individuos que han presentado síntomas leves de resfriado y test PCR positivo se utilizaron como puntos de datos para mostrar los niveles de covid-19 en el ensayo clínico randomizado con un grupo de control o testigo no vacunado. Ninguno de estos casos sospechosos de covid-19 se confirmó mediante criterios de diagnóstico específicos de los síntomas o mediante la secuenciación de Sanger. Peor aún, estos casos de enfermedad leve se utilizaron como datos para demostrar que la "vacuna" salvaba vidas que ni siquiera salvaba.

Incluso el director médico de Moderna, Tal Zaks, declaró al British Medical Journal que sus ensayos clínicos no determinan si las "vacunas" previenen enfermedades graves, hospitalizaciones o muertes. En su lugar, los ensayos se limitan a comparar las tasas aleatorias de enfermedad leve y síntomas no específicos durante un periodo de tiempo concreto.

La mayoría de las personas que dan positivo en el test covid-19 sólo presentan síntomas leves. Sus vidas no están en juego. Hubo muy pocos casos de enfermedad grave en los ensayos, sin embargo la "vacuna" se presentó como "segura y eficaz" porque un mayor número de personas en el ensayo clínico randomizado con un grupo de control dio inevitablemente positivo en los tests PCR fraudulentos. Estos casos positivos PCR nunca se confirmaron como personas con enfermedad grave y muerte potencial.

De hecho, ¡un gran porcentaje de la cohorte vacunada contrajo síntomas leves y graves! Estos problemas médicos (que ahora se observan ampliamente en la población) no habrían ocurrido si la gente no hubiera sido envenenada por las "vacunas" en primer lugar. Algunos de estos síntomas fueron graves, pero esto no tenía importancia para los ensayos clínicos y sus criterios de evaluación; Los ensayos clínicos se han construido en torno a las tasas de positividad y los síntomas leves, ninguno de ellos ha estudiado la enfermedad grave o la hospitalización. Por eso, hoy en día millones de personas se recuperan con la inmunidad natural, mientras que otras que se vacunan sufren graves lesiones, siguen padeciendo enfermedades graves o mueren a causa de las inyecciones.

(Fuente: SteveKirsch.substack.com; visto en http://www.verdadypaciencia.com/)