La Mentira de la “eficacia y seguridad” de estas terapias génicas ya eran conocidas el año pasado cuando se publicaron los ensayos clínicos y los gobiernos junto con los medios masivos de comunicación se dedicaron a engañar a la población y censurar las voces autorizadas que explicaban el engaño. Le dijeron al público que estas vacunas daban “inmunidad”, para al poco tiempo ir abandonando ese término y pasar a “protección”. También mintieron los medios, funcionarios públicos y expertos mediáticos acerca de que estas terapias génicas evitaban la transmisión, cuando nunca fue el caso. Hoy actúan como si eso nunca hubiera pasado mientras le venden nuevas dosis de refuerzo a una población condicionada por el miedo y llevada por la ignorancia al matadero. Una población que ya se inoculo doblemente con terapias genéticas que no tienen estudios de toxicidad ni de efectos a largo plazo. Recomendaron desde un comienzo, y siguen haciéndolo hoy, la inyección a mujeres embarazadas sin que existan estudios al respecto. Y ahora quieren a los niños.
Como se menciona en el video, la realidad de la eficacia de la vacuna de Pfizer es menos de 1%, la Reducción del Riesgo Absoluto -que es la que importa- es de 0.84%. Las otras empresas siguieron con la misma mentira, la Reducción del Riesgo Absoluto de Moderna es de 1.2% (Vendieron 94% de la Reducción de Riesgo Relativo), la de J&J es de 1.2% (Vendieron 67% de la Reducción de Riesgo Relativo), la de AstraZeneca es 1.3% (Vendieron 67% de la Reducción de Riesgo Relativo).
Obviamente ahora el guión es que nunca prometieron lo que prometieron mientras simultáneamente, tratar de vender el tercer y cuarto “refuerzo” a las personas que tomaron los primeros 2 o 3, mientras se trata de vender la primera dosis como "altamente efectiva" a las personas que tomaron cero… El test de coeficiente intelectual que es la plandemia subió un nivel más la exigencia. Que comience el juego.
Al mismo tiempo que se construye el Estado de Bioseguridad sobre los “registros de vacunación”, conocidos como PasaporteCovid o Pasaporte Sanitario, o, en su versión "cambio climático", “Pase Verde”.